DYANE CITROËN

Diseñado a partir de 1964 y presentado en 1967 como una alternativa moderna y más lujosa al emblemático 2CV, el Citroën Dyane iba a sustituir a su antecesor. Pero esto fue sin contar con el espíritu de resistencia de Mamie y sus fans.

Dyane Citroën un poco de historia

En la primera mitad de los años 60, la gama del fabricante francés de los chevrones era esquelética y desequilibrada. Sólo había tres modelos principales: en la parte inferior de la gama, el 2CV, que tenía que hacer frente a la competencia del recién lanzado Renault 4. En el centro de la gama, el Ami 6, que lucha por despegar frente a sus dos hermanas legendarias. Y por último, en el tope de la gama, la DS, que se sitúa sola en la cima.

El objetivo fijado para el futuro coche no es sólo sustituir al mítico Deuche, sino también elevar el nivel de prestaciones que ofrece la gama de entrada. El problema es que las finanzas de la marca no prosperan. Tendrá que modernizarse económicamente.

Dyane, un auténtico Citroën a pesar de todo

El público descubrió el nuevo Citroën Dyane en el Salón del Automóvil de Frankfurt de 1967. Sus líneas tensas eran muy acordes con la época, con faros empotrados rodeados de cromo, una parrilla típica, un techo descapotable y un portón trasero. No cabe duda de que el Dyane se inspira en el 2CV, pero cuidando de modernizar sus líneas. Su perfil se inspira en gran medida en el diseño de su antecesor, pero más lujoso y travieso. Se beneficia de un capó totalmente abatible, pero el color de la carrocería y la elección de los colores de la misma son más… chispeantes. Completamente basado (por razones de economía) en los fundamentos del 2CV, hereda los motores típicos de la marca para las gamas bajas y medias, es decir, el 425 cm3 con 21 CV, y el totalmente nuevo 435 cm3 con 26 CV. Permite al Dyane alcanzar una velocidad máxima de 102 km/h. La primera generación de 602 cc, utilizada en el Ami 6, tiene 26 CV y una velocidad máxima de 110 km/h. Por último, la segunda generación de 602 cm3, utilizada en el nuevo Ami 8, tiene 35 CV y una velocidad máxima de 130 km/h.

El drama de la Dyane iba a tener lugar debido a las malas decisiones tomadas por sus creadores para sus modelos equipados con el famoso motor bicilíndrico de la casa. El Dyane no consiguió encontrar su lugar entre este rústico 2CV, que el fabricante mejoraba constantemente tomando prestadas las novedades del último modelo, en lugar de dejar que terminara su carrera tal cual, y el más caro pero más moderno Ami 8. Otro parámetro que Citroën no midió lo suficiente fue el hecho de que la clientela del antiguo 2CV era rural y muy conservadora. A pesar de los avances del recién llegado, los franceses seguirían comprando el 2CV. El coche que debía sustituir resultaría fatal. A pesar de un repunte a principios de los años 70 debido a la crisis del petróleo, que le permitió ganar cuota de mercado a costa de modelos más grandes, su carrera llegó a su fin en 1983 tras haber producido casi 1.500.000 unidades.

A pesar de todo, el Citroën Dyane se está vengando (tal vez) hoy en día: después de haber sido dejado de lado durante mucho tiempo, cuando se utilizaba no sólo como banco de piezas para los 2CV, este coche ha vuelto a ser favorecido por el alto precio de los 2CV. Permite comprar un coche casi mítico, con una diferencia, por un precio todavía accesible, detalla el concesionario de coches de ocasión Murcia Crestanevada.