A finales de este año, no pasa una semana sin que se anuncien noticias que afectan a los propietarios de coches con motor diésel y, ahora más ampliamente, a los usuarios de todos los vehículos con motores de combustión.
No hay que asustarse. Demos un paso atrás y descubramos con el concesionario coches segunda mano Granada Crestanevada de las posibilidades que se abren ante ti.
Sin llegar a imitar a los Amish de Pensilvania, que siguen conduciendo tilburys tirados por caballos en el siglo XXI, hemos identificado una serie de alternativas para usted. SÍ, existen otras fuentes de energía más limpias; a veces sin tener que cambiar de carro. Aquí trataremos de ofrecerle soluciones existentes y no lo que actualmente (aunque tal o cual concepto sea prometedor) sólo funciona en fase de prototipo.
Conducción 100% eléctrica
Esta es la motorización que va en aumento. Esto se debe principalmente a la voluntad de nuestros gobiernos de apoyar este cambio mediante la concesión de numerosas primas de conversión y diversas ayudas. Algunos ayuntamientos incluso dan un impulso adicional para ayudar a la compra. Sin embargo, a pesar de todas estas ayudas, convertirse en propietario de un vehículo totalmente eléctrico está muy por encima de las posibilidades de muchas personas. Por no hablar del hecho de que la oferta en los catálogos de los fabricantes suele limitarse a pequeños modelos urbanos. Además, un coche eléctrico tarda una media de cuatro años en ser más rentable que su equivalente de combustión interna. Incluso si los analistas estiman que la situación se revertirá sin ayuda financiera para la compra dentro de diez años.
Conducción parcialmente eléctrica
Dos posibilidades:
– Híbrido simple, aprovecha la energía liberada por las deceleraciones de su coche para recargar la batería que permite viajar a baja velocidad. La ventaja es que el motor de combustión consume menos combustible y es muy fiable, ya que este sistema existe desde hace muchos años (por ejemplo, el Toyota Prius). Desventaja: el motor de combustión sigue siendo el principal medio de locomoción.
– Híbrido recargable, un modelo híbrido recargable puede ser una buena respuesta, en la medida en que su autonomía, en la mayoría de los casos superior a los 50 kilómetros tras la recarga de la batería, puede permitir realizar la mayoría de los desplazamientos diarios en modo eléctrico.
En ambos casos, puede valer la pena considerar la compra de un modelo de segunda mano. No podrá beneficiarse de las subvenciones, pero en general la inversión será más fácil.
Conduce con gas
– GLP, ventajas que ya existen casi 2000 estaciones de recarga y un precio por litro que ronda los 0,80€. Inconveniente: consumo entre un 20% y un 30% mayor e instalación sólo posible en motores de gasolina (coste de 1.500 a 3.000 euros según el coche).
– El GNC, hasta ahora utilizado principalmente por los profesionales, está empezando a ofrecer vehículos de segunda mano a precios muy interesantes. Desventaja, una red muy débil de estaciones de recarga pero en curso de desarrollo pero ventaja, un precio atractivo 1,25 por litro.
Conduciendo con combustible E85
Con un precio por litro de unos 0,65 euros, el etanol (el otro nombre del E85) parece ser una de las soluciones más interesantes. Tanto más cuanto que la red de distribuidores se ha desarrollado realmente. Ahora hay surtidores de este combustible en todas partes, tanto en las autopistas como en los supermercados. La desventaja es que sólo se puede utilizar con motores de gasolina y consume alrededor de un 20% más de combustible (pero aumenta considerablemente la potencia de su motor. Por ejemplo, un motor de 150 CV se beneficiará de 180 CV cuando funcione con E85). Las unidades de conversión de etanol deben ser ahora homologadas. El precio medio de un equipo serio es de unos 700 euros, por lo que se puede amortizar en el primer año tras unos pocos miles de kilómetros. La última ventaja es que, si no hay un surtidor adecuado, se puede recargar con gasolina normal, ya que los dos combustibles se mezclan sin ningún problema. Todo el trabajo lo realiza la caja electrónica instalada por el especialista.
Por fin se ve que hay que ser sensato. No te precipites a la primera oferta que recibas y analiza tus necesidades con calma antes de desechar tu antiguo V6, tan entrañable.