PRUEBA DEL VOLKSWAGEN T-ROC

El Volkswagen T-ROC es un vehículo extravagante y elevado que está a medio camino entre un crossover urbano y un SUV compacto. Recuerda mucho a su famoso hermano mayor el Golf. ¿Pero es más interesante para el comprador potencial? El concesionario de coches segunda mano Barcelona Crestanevada nos da las claves.

El confiado T-Roc destaca claramente con su expresivo diseño crossover y sus numerosas opciones de personalización.

El estilo del T-Roc ya es más moderno y menos clásico que los productos habituales de la marca. Por ejemplo, su zaga biselada en tres cuartos, sus intermitentes integrados en las entradas de aire del parachoques delantero, sus tintes de colores o su techo con un tono distinto lo diferencian del Golf con el que comparte plataforma.

Con la configuración bitono, puedes elegir el color de la carrocería y combinar un segundo color para el techo, los retrovisores exteriores y los pilares delanteros. Los colores rojo, azul, amarillo, naranja o negro roble permiten acentuar el estilo atlético del T-Roc. Puedes optar por una combinación llamativa de dos colores contrastados o por una más sobria.

En cuanto a los materiales, el último modelo se aleja de los estándares habituales de la marca alemana, con muchos plásticos duros. Por otro lado, la presentación es bastante acertada y moderna con un bonito panel digital. Por otro lado, si no se aprovecha el salpicadero y los paneles de las puertas de color, el conjunto es realmente muy oscuro. Pero es bastante práctico con mucho espacio de almacenamiento, como el cajón bajo el asiento del pasajero.

El espacio para las piernas es decepcionante para un vehículo de este tipo. No es el caso del Golf, que tiene el mismo tamaño y se vende al mismo precio. Lo mismo ocurre con el maletero, que, si se elige la tracción total, pierde 53 litros para alcanzar un volumen de carga de 392 litros, poco para la categoría. Por no hablar de la modularidad básica del asiento trasero, con sólo un sistema de banqueta 1/3 2/3.

Con una posición de conducción alta y agradable, un manejo muy seguro y sin sorpresas, la máquina da a su conductor una sensación de agilidad no vista en un SUV, las ruedas traseras ruedan en las curvas, como un pequeño «GTI». Para completar el cuadro, los frenos son tranquilizadores en cualquier circunstancia.

En los modelos con tracción total, la tracción es excelente en todas las superficies y cuando la carretera está resbaladiza. Por otro lado, la agilidad del T-Roc se ve muy mermada en estas situaciones. El vehículo sigue teniendo un buen nivel de dinamismo, pero los cambios de agarre son menos sensibles y el frontal sufre de una entrada perezosa en las curvas. Pero sigue siendo cómodo en todas las superficies, incluidas las carreteras más degradadas y las pistas de tierra.

En cuanto a los motores, destaca el pequeño pero potente 1.0 TSI de 3 cilindros con 115 CV en el motor base, que es sin duda el más logrado de todos los que se ofrecen. Si no necesitas tracción a las cuatro ruedas, este es el motor para ti.

Si el T-Roc te hace soñar, hay mucho donde elegir en el catálogo de Volkswagen. En cuanto a acabados y opciones, hay para todos los gustos. En tu mano está decidir si prefieres una berlina como el Golf o su hermano pequeño SUV.